¿Cómo se expresa en concreto el hecho social?
En la tradicción de Durkheim se podría hablar de diversas formas de expresión de lo que él mismo definió como la fuerza de la sociedad: la coacción y el castigo; las normas y las diversas formas del Derecho; la educación y la moral; las formas de suicidio; las categorías de tiempo, espacio, persona, lo sagrado y lo profano, que se manifiestan en cada acto. Cada uno de estos elementos es una muestra empírica de la existencia de esa fuerza de lo social.
Los análisis de Mauss sobre el don nos acercaron a diversas expresiones concretas de lo social, desde el acto de dar singular, que incluye dichos y formas de sacralización de la reciprocidad, hasta instituciones complejas como el Potlatch, la fiesta, la limosna. La fuerza de lo social se expresa en estas diversas formas de don, regalo, gasto o consumo.
Otro acercamiento, el de la acción, muestra la experiencia de lo social en la significación o sentido de las acciones y su referencia a los otros. Los actos incluso se parecen a las actuaciones, el performance, la máscara, como una vida social que parece más al teatro (no a una fuerza física o a un acto mágico repetido, como las perspectivas anteriores).
Una perspectiva más se refiere a lo social en concreto en los actos como entidades expresivas, emotivas, no sólo cargadas de significado o sentido sino cargadas de elementos "subjetivos" que rayan en ocasiones en lo innenarrable, en lo inexpresable, como el dolor. Eso incluye diversas maneras de entender o representar el mundo social que incluyen entidades, fuerzas, capacidades, habilidades que se objetivan más allá de las sensaciones inmediatas (o más bien, se vuelven sensaciones inmediatas, como la posesión demoniaca o la capacidad de hablar lenguas desconocidas). Lo social se expresa especialmente en formas de experienciar el mundo, manifiestas en el cuerpo y sus múltiples usos, desplazamientos y movimientos.
Otra más es la que se enfoca en lo social como prácticas, que son al mismo tiempo flujos de acciones y relaciones previas (una historia social) y actos semiconcientes, semireflexivos, intencionados, estratégicamente diseñados o interesados. Lo social tiene aquí expresión en la acción misma, condensación de una trayectoria de múltiples fuerzas y momento de elecciones y alternativas de trayectoria posibles.
¿Cómo pensamos que se expresa lo social en los estudios que iniciaremos? ¿Qué objetos empíricos serán los centrales en nuestros estudios? ¿A través de que instrumentos y de qué experiencias o formas de intervención o de registro podremos hacer asequible esa fuerza, esa dimensión, esa experiencia, esa magia, ese fluir de acción que es la sociedad?
José Luis Escalona Victoria
En la tradicción de Durkheim se podría hablar de diversas formas de expresión de lo que él mismo definió como la fuerza de la sociedad: la coacción y el castigo; las normas y las diversas formas del Derecho; la educación y la moral; las formas de suicidio; las categorías de tiempo, espacio, persona, lo sagrado y lo profano, que se manifiestan en cada acto. Cada uno de estos elementos es una muestra empírica de la existencia de esa fuerza de lo social.
Los análisis de Mauss sobre el don nos acercaron a diversas expresiones concretas de lo social, desde el acto de dar singular, que incluye dichos y formas de sacralización de la reciprocidad, hasta instituciones complejas como el Potlatch, la fiesta, la limosna. La fuerza de lo social se expresa en estas diversas formas de don, regalo, gasto o consumo.
Otro acercamiento, el de la acción, muestra la experiencia de lo social en la significación o sentido de las acciones y su referencia a los otros. Los actos incluso se parecen a las actuaciones, el performance, la máscara, como una vida social que parece más al teatro (no a una fuerza física o a un acto mágico repetido, como las perspectivas anteriores).
Una perspectiva más se refiere a lo social en concreto en los actos como entidades expresivas, emotivas, no sólo cargadas de significado o sentido sino cargadas de elementos "subjetivos" que rayan en ocasiones en lo innenarrable, en lo inexpresable, como el dolor. Eso incluye diversas maneras de entender o representar el mundo social que incluyen entidades, fuerzas, capacidades, habilidades que se objetivan más allá de las sensaciones inmediatas (o más bien, se vuelven sensaciones inmediatas, como la posesión demoniaca o la capacidad de hablar lenguas desconocidas). Lo social se expresa especialmente en formas de experienciar el mundo, manifiestas en el cuerpo y sus múltiples usos, desplazamientos y movimientos.
Otra más es la que se enfoca en lo social como prácticas, que son al mismo tiempo flujos de acciones y relaciones previas (una historia social) y actos semiconcientes, semireflexivos, intencionados, estratégicamente diseñados o interesados. Lo social tiene aquí expresión en la acción misma, condensación de una trayectoria de múltiples fuerzas y momento de elecciones y alternativas de trayectoria posibles.
¿Cómo pensamos que se expresa lo social en los estudios que iniciaremos? ¿Qué objetos empíricos serán los centrales en nuestros estudios? ¿A través de que instrumentos y de qué experiencias o formas de intervención o de registro podremos hacer asequible esa fuerza, esa dimensión, esa experiencia, esa magia, ese fluir de acción que es la sociedad?
José Luis Escalona Victoria
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